10.26.2008

A UNA MINA ARGENTINA


¡Oh inmensa belleza azul, hermoso otoño!

El viento me atrapa y corta mis palabras
Cuando caminas descalza en mis sueños.

El color de tu nombre dispersa las tinieblas
Y encuentro en él lo que une el mar y el cielo.

Todo en ti es agradable y jubilosa calma
Y en tus bellos ojos desaparecen las fronteras.

Tus delicados pasos ahuyentan el crepúsculo
Y atraen huracanes de felicidad que gobiernan mi esencia.

Verte reír es escalar montañas y nevados para conseguirte la luna,
Verte brillar es sumergirme en las estrellas para dormir en tu regazo,
Verte actuar es desencajar la realidad y dibujar una sonrisa en mi alma,
Verte volar es ausentarme de mi cuerpo y morir en la pasión de tu lejano e indeleble amor.

Pues te amo entre la soledad oculta y las palabras sueltas que corren hacia el azul del mar, tratando, irasciblemente, de vencerme para gritar mi desvelo cotidiano y estas ganas nocturnas de tocarte y entregarme a ti sin finales desconsolados y abatidos por opacas sombras sedientas de tu amor.

De tu amor, que espero que algún día y para siempre, sea más mío que tuyo.